María Gramajo, una comerciante del departamento Santa Rosa, denunció en declaraciones radiales que el intendente de Bañado de Ovanta, Elpidio Guaraz, la amenazó con un arma. El hecho ocurrió el miércoles a la noche en el paraje Monte Redondo. La denuncia se radicó en la Policía de Santa Rosa.
“Venía de casa de mi mamá para mi casa de Monte Redondo –relató Gramajo-, y yo no sabía que el intendente estaba ahí. Salía de la casa de la familia Mendoza. Yo pasé, venía en el auto y tenía el teléfono en la mano porque venía hablando con mi hija. Cuando me bajé en mi casa, venía él (Guaraz) por atrás. Yo me bajo y cuando iba entrando, siento a alguien que me toca bocina y era él. Baja el vidrio y me dice: ‘¿por qué no le vas a sacar fotos a la concha de tu madre…? Y sacaba algo, como un arma y me mostraba. ‘Te voy a hacer mierda’, me decía. En eso salió mi marido, cerró el vidrio y se fue”, relató la mujer.
Gramajo se mostró sorprendida por la actitud del intendente porque asegura que no tenía ningún conflicto previo y tampoco entiende cuál fue la situación que lo incomodó.
El abogado Pedro Vélez, quien asumió la representación de la mujer, confirmó que ayer a la mañana se presentaron en Fiscalía General para ampliar la denuncia y se encontraron con que la Policía no había girado la denuncia para que actúe el fiscal de turno. Esta situación complica la investigación de los hechos porque demora la posibilidad de tomar medidas.
Además, se pidió que se inhiba el fiscal Luis Baracat, ya que tiene una relación de parentesco con el intendente de Santa Rosa.
Finalmente, la causa recaería en el fiscal Víctor Mauvecín, pero hasta el cierre de esta edición no se había confirmado.
El Ancasti trató de dialogar con el intendente, pero no respondió a la requisitoria. En su página de Facebook, en la que generalmente se defiende de las acusaciones, publicó la entrega de materiales para la construcción de un baño para una persona de escasos recursos.