SEGUIRÁ INVOLUCRADO EN LA CAUSA DE LAS ÓRDENES TRUCHAS
El fiscal Marcelo Sago deberá seguir investigando. Tiene 60 días para culminar la pesquisa.
La Cámara de Apelaciones resolvió rechazar la absolución del médico Carlos Vega Ramírez que estaba imputado en la causa conocida por las órdenes truchas.
Además, ordenó al fiscal que entiende en la causa, Marcelo Sago que siga investigando y que en un plazo de 60 días concluya la causa que se inició hace varios años.
El jueves, se había realizado la audiencia en el tribunal en la que el fiscal de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Administración Pública solicitó que se revoque el pedido de sobreseimiento que había sido solicitado por el juez de Control de Garantías, José Carma para el médico. La abogada Vilma Alcázar ejerció la defensa del profesional de la salud y afirmó que Vega Ramírez es «una víctima» de una trama que fue planificada por otros.
Por unanimidad, la Cámara, conformada por Raúl Da Prá (presidente), Juan Pablo Morales y Rodolfo Bustamante, hizo lugar al planteo del representante del Ministerio Público por lo que Sago podrá seguir investigando. Sin embargo, el tribunal lo exhortó para que concluya la pesquisa en un plazo de dos meses.
Los fundamentos se conocerán el próximo viernes al medio día.
En la jornada del jueves, Sago cuestionó el «principio de insignificancia» al que recurrió el juez de Control de Garantías quien había argumentado que la cantidad de órdenes truchas que habría recibido el médico no implicaban un daño a la hacienda pública».
«El hecho que la fiscalía le imputa consiste en un fraude a la hacienda pública. Causaron un daño por la facturación que como médicos realizaron ante OSEP, mediante la utilización de órdenes de consulta médica adulteradas. De esta manera hacían aparecer como que atendían determinados pacientes que jamás fueron atendidos», dijo.
Sago consideró que los hechos imputados no pueden ser encuadrados en el principio de insignificancia y mencionó que la investigación comprobó que se recurrió a la adulteración de un instrumento. «Y tampoco tiene en cuenta que si bien el médico facturaba de manera individual, existe en lo más de 10 profesionales que facturaron a OSEP con facturas apócrifas que todos utilizaron las mismas facturas apócrifas respecto de los mismos e idénticos pacientes», sostuvo.
En la fundamentación concluyó que la insignificancia del hecho no se encuadra para este caso.
La abogada Vilma Alcázar hizo referencia al prestigio del médico, a su pertenencia al Poder Judicial y también defendió la nimiedad de los hechos que se le imputan. «Vega Ramírez es una víctima del proceso y voy a recurrir a las estrategias posibles para no someterlo a un escarnio público», inició.
Más adelante, se refirió a las condiciones de trabajo que Vega Ramírez tiene en un sanatorio privado.
En ese contexto señaló que varios profesionales compartían las mismas secretarias. «Es víctima de un proceso armado por alguien, porque él no recibe las órdenes sino las secretarias», dijo para señalar que esas órdenes truchas podrían haber sido destinadas para otros profesionales que están imputados.
Vega Ramírez, fue el único médico sobreseído por el juez de Control de Garantías. En 2014, unos 11 médicos fueron imputados por el delito de fraude en perjuicio de la administración pública en concurso ideal, con uso de instrumento privado adulterado, al comprobarse que en la facturación que realizaban a la OSEP figuraban órdenes de consulta médica con los números del código de barras adulterados y sin que correspondan a los afiliados que decían haber atendido.