ESTÁ UBICADO EN CHUMBICHA, CAPAYÁN
Investigan a quienes hacían servicios adicionales. La Jefatura analiza el pase a disponibilidad.
La desaparición de un malacate eléctrico que estaba en el frigorífico de Chumbicha volvió a poner a la Policía en la mira de la Justicia, ya que sospechan del accionar de quienes cumplían servicios adicionales en ese predio.
La sustracción de la herramienta motivó que desde la Comisaría Departamental de Chumbicha se iniciaran actuaciones de oficio y se le dio intervención a la Fiscalía de Instrucción N° 1, a cargo de Víctor Ariel Figueroa.
Debido a que los uniformados que cumplían trabajo de consigna en el frigorífico eran numerarios de la Comisaría de Chumbicha, se resolvió que sean apartados de las tareas investigativas y se convocó a sus pares de la Comisaría de Huillapima para que lleven adelante las averiguaciones correspondientes. El malacate estaba en la cámara de frío. La grave denuncia motivó que durante la tarde de ayer se trasladara a Chumbicha una comitiva de la Jefatura Policial, Investigaciones Judiciales y de la División Criminalística.
Pase a disponibilidad
La noticia cayó de mala manera en la plana mayor policial. Se analizaba el sumario y pase a disponibilidad de todos los policías que realizaron trabajos adicionales en el frigorífico.
El caso de Recreo
El otro incidente que puso a la Policía de la Provincia en la lupa de la Justicia es la denuncia por la sustracción de mercaderías que estaban en calidad de secuestro en la Comisaría Departamental de
Recreo.
La investigación se originó a principios de la semana pasada tras la denuncia radicada por un subcomisario de apellido Ortega, quien había puesto en conocimiento la desaparición del millonario cargamento, que consistía en prendas de vestir y calzados.
La causa se tramita en la Fiscalía de la Sexta Circunscripción Judicial, a cargo de Jorgelina Sobh.
Ayer se llevó a cabo la audiencia de control de detención del agente Ismael Moya, a quien el juez de Control de Garantías subrogante Fernando Adet Caldelari le confirmó que seguiría privado de su libertad.
Moya al igual que el sargento Diego Cejas, el oficial Gustavo Véliz y el agente Walter Abad están imputados por «robo agravado». Los cuatro están detenidos.
Por su parte, hay cinco comisarios que están imputados por «omisión en los deberes de funcionario público». Son Javier Contreras, Raúl Vaquel, Hugo Martínez, Oscar Giménez y Raúl Regalado. Este último será indagado a la mañana en Fiscalía.