Frigoríficos municipales están complicados por nuevas exigencias

EL MINISTERIO DE PRODUCCIÓN ASISTIRÁ A LAS COMUNAS EN LA ADQUISICIÓN DE TECNOLOGÍAS

Deben incorporar un sistema electrónico para el control de la faena que tiene un alto costo para las comunas.

El director de Ganadería de la Provincia, Rosendo López, admitió que los frigoríficos municipales tienen inconvenientes para cumplir con los requerimientos tecnológicos dispuestos por el Ministerio de Agroindustria de la Nación. De todos modos, negó que ésa sea la causa para el cierre del Frigorífico Municipal.

Se trata de un Centro Electrónico de Faena que deberían implementar todos los mataderos.
«Desde el Ministerio estamos contactándonos con las empresas que hacen esos sistemas operativos, que constan de una cámara y una balanza y controlan la faena. Las cámaras enfocan las medias reses y el peso», explicó López. Se trata de un sistema que permite el control para mejorar la recaudación por contribuciones y evitar que se falseen datos.

Según explicó, estos nuevos requerimientos representan una complicación para los mataderos municipales porque la adquisición de los equipos sale cerca de 240 mil pesos. «Es un costo grande para un matadero municipal. Desde el Ministerio de Producción se está viendo de adquirir las cámaras en forma conjunta con los municipios que tienen los mataderos», explicó.

La Municipalidad de la Capital tomó la decisión de cerrar el Frigorífico Municipal por una intimación de la Municipalidad de Valle Viejo, dada la cercanía con la zona residencial en Sumalao. La medida generó preocupación en un grupo de matarifes, ya que el cierre de ese matadero los obligará a faenar en establecimientos privados.

Otra visión

Por su parte, empresarios del medio opinaron que la salida de funcionamiento del Frigorífico Municipal no traería aparejadas mayores dificultades para los productores del Valle Central, pues en la zona se cuenta con dos frigoríficos clase A, que permiten que la faena cuente con permisos para trascender los límites provinciales, fomentando así una posibilidad de fortalecer el comercio.

En este contexto, se indicó que la actividad que mantenía el predio municipal era mínima, por lo que tranquilamente aquella demanda insatisfecha podrá ser captada por la actividad privada.

Valoraron que pese a que el predio cumplía un importante fin social, el paso de los años y las menores condiciones para realizar la faena lograron que cada vez fueran menos los productores que se valían de él para el proceso. Coincidieron que un predio de este tipo en el interior provincial sí justifica su funcionamiento, donde se registra una mayor cantidad de productores pequeños que tienen menores posibilidades de acceso a realizar faenas en predios autorizados.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *